Karolina “La negra” ha llevado el flamenco a muchos rincones del mundo, Corea, Japón, Alemania, Francia, Grecia, Portugal, forman parte de los países donde ha enseñado a esos apasionados amantes profesionales y fortuitos de las bulerías, las seguiriyas, los tangos y las soleas. Siempre siendo fiel al flamenco tradicional, con pasión, esa misma con la que lleva su patria colombiana en el corazón y en sus zapatos.